Prendedor Cunita, realizado en resina pintada a mano y paisaje del desierto hecho con corteza de queñua, quínoa, polvo de comino, y hoja de oro 22k. Enmarcado en cobre con 2 rosas hechas a mano y mecanismo también en cobre. Sistema de doble aguja de acero quirúrgico.
Este broche pertenece a la colección Siempre Viva del 2014 y es el único disponible. El paisaje es una representación de los antiguos cementerios de las salitreras.
Tamaño colgante 11,5x5,5cm.
SOBRE LA COLECCIÓN SIEMPRE VIVA
Siempre Viva es una nueva mirada sobre el sincretismo nacido a partir del catolicismo y el animismo indígena, que persisten hasta hoy, dejándose ver en el culto a los muertos. Las animitas y los coloridos cementerios del desierto, son expresiones actuales que nos hablan de la cosmovisión y estética de los pueblos originarios, que se han colado en el tiempo y persisten hasta hoy. Una muerte colorida y adornada.
Animitas, cruces, desiertos, sol, relicarios, coronas de flores coloridas, coronas de flores oxidadas, y otros, forman parte de este imaginario. Construyen una mirada desde el barroco latinoamericano en torno al recuerdo y la permanencia de los muertos a través de los vivos. Los principales materiales empleados son cobre, pátinas y resina. Además, cada paisaje está creado con especias como canela, pimienta, sémola y harina tostadam entre otros.
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